¿Quién es Aradia?
(Por Armando Volterra)
"¡Aradia, Aradia! Te
Suplico
¡por el amor que ella
profesó por ti!
¡Y por el amor que yo
siento también por ti!
¡Te invoco para que me
concedas la gracia que pido!"
concedas la gracia que pido!"
He leído
últimamente muchos blogs en la red con todo tipo de información, alguna
interesante y otra muy desatinada; el presente artículo, (aunque no lo
considero un dogma de fe); esclarecerá quién es la figura mesiánica que está
cobrando terreno en la espiritualidad occidental. Si, se trata de Aradia, la
mesías de la brujería.
En el año de
1899, aparece un curioso trabajo, de un curioso folclorista y antropólogo
llamado Charles Godfrey Leland; un trabajo que él titula: Aradia, o el
evangelio de las brujas. Este documento se basa, al menos en sus primeros capítulos;
en un manuscrito que Leland consiguió de manos de una vidente italiana llamada
Maddalena Taluti, (anteriormente se creía que su apellido era Talenti, pero
los descubrimientos modernos dicen que su apellido es Taluti). La vidente
italiana tardó alrededor de diez años en enviar a un anciano Leland, un
misterioso documento que ella llama, el Vangelo,
y este comienza así:
Diana amó
desmesuradamente a su hermano a Lucifer, el dios del Sol y de la Luna,
el dios de la Luz, que
era exageradamente narcisista, y por causa de su orgullo fue desterrado del
Paraíso.
Diana tuvo una hija con
su hermano, a quien dieron el nombre de Aradia.
En esta
epopeya se nos narrá la opresión del pueblo campesino a manos de los señores
feudales y de la iglesia católica, entonces la antigua Diosa pagana, Diana; manda a su hija Aradia a enseñar a los pobres y oprimidos la brujería. El texto
lo expone poéticamente de esta manera:
En verdad fuiste concebida y creada por el Espíritu,
pero naciste para volver a ser otra vez mortal;
debes volver a bajar a la tierra para instruir a mujeres y hombres.
A todo quién esté dispuesto a estudiar
la brujería en tu escuela.
El texto sigue narrando como Aradia, quien es
hija de Lucifer, (haciendo clara referencia al diablo cristiano) y de la Diosa
pagana Diana; enseña a sus alumnos todo
tipo de brujería, a defenderse de los opresores y a seguir una comida ritual
que se celebrará cada Luna llena. Maddalena pone en boca de Aradia las
siguientes palabras:
Cuando me habré marchado de este mundo,
Siempre que vosotros tengáis la necesidad de algo,
Una vez el mes, y cuando la luna este llena,
Os reuniréis en algún lugar del desierto,
O en un bosque solitario y adorareis al poderoso
Espíritu de vuestra Reina,
Mi madre, La Gran Diana. Ella gustosamente
os enseñará toda la brujería que aún no habéis aprendido
Sus secretos más profundos, entonces mi madre
os enseñará, la verdad de todas las cosas aún desconocidas.
Y seréis liberados todos de la esclavitud,
Y entonces seréis libres en todo;
Y como signo que sois realmente libres,
Estaréis desnudos en vuestros ritos, tanto hombres
como mujeres; esto durará hasta que
el último de vuestros opresores será eliminado;
Y haréis el juego de Benevento
apagando las luces, y después de esto
celebrareis vuestra cena así.
(Este texto dará origen a
"la carga de la Diosa", escrita por Doreen Valiente y recitada por
todos los seguidores de la Wicca, véase Stregheria, Aradianismo y Wicca).
Desde que Leland se enteró
de que existía un supuesto evangelio de las brujas, y hasta el momento que Maddalena le envió el manuscrito del Vangelo, pasaron cerca de diez años. Esto demuestra
según algunos, que Maddalena no pertenecía a la tradición que circulaba las
historias de Aradia. El viejo Leland, (quien ya veía próxima su muerte); se apresuró a publicarlo, aunque el texto tenía
malas traducciones del italiano y errores ortográficos. Él sabía el incalculable
valor de este documento, sin embargo; los críticos se dividieron en cuanto al
descubrimiento de este manuscrito, en tres posturas que persisten hasta la actualidad:
a)
El documento es auténtico y representa una forma
de brujería totalmente desconocida hasta ahora.
b) El
documento es en parte verdad, y en parte añadidos posteriores o malas
interpretaciones; ya sea por parte de Leland o de Maddalena.
c)
Todo el documento es una falsificación de Leland.
La mayoría de los eruditos de ese
entonces y los de hoy, descartan la realidad sobre Aradia, o el evangelio de
las brujas; argumentando que antes de la publicación de este documento no hay
ninguna mención a una tal “Aradia”, lo que parece más bien que el nombre fue
inventado. Sobre esto, el mismo Leland cree que se trata de una variante
italiana del nombre de Herodías, por cuya intervención decapitaron a Juan
Bautista. Otro de los argumentos en contra es el cual, una mesías femenino y
una comida ritual eran conceptos muy avanzados para aquella época.
En cuanto al nombre, el antropólogo
Ginzburg, famoso por su descubrimiento de los Benandati, (lo cual volvió a
abrir para la academia la posibilidad de un verdadero culto brujeril); propone
que el nombre es un compuesto de Hera y Diana, lo que formaría a Eradiana. Razón
que no es inverosímil, ya que en la antigüedad eran normales los nombres
compuestos como Juno-Lucina o Zeus Cronida. Donald Hutton cree, como expone en
su libro “El Triunfo de la Luna”; que la identificación de Aradia con Herodías,
se debe a la novela de” La Bruja”, de Michelet, y que gran parte de lo que se
expone en Aradia no es más que pura inspiración de esta novela, (incluyendo el
nombre).
Durante el siglo XX, se crea la Wicca; una religión brujeril neopagana, que alegaba antiguamente ser "La vieja religión". Inspirado por las teorias de la ahora desacreditada, Margaret Murray; el fundador de la wicca llamado Gerald Gardner dice que encontró un verdadero coven que sobrevivió, no solo desde la Edad Media; sino desde la época prehistórica. Este supuesto culto adoraba, (y ahora, adora); a un Dios masculino que ellos llaman Cernunnos, (dios de origen celta), dios astado del campo y la fertilidad. La contraparte de Cernunnos sería la Diosa, llamada en la Wicca: Aradia. Margaret Murray, (y por extensión, Gerald Gardner); creían que hubo un culto antiguo euroasiático que adoraba a un Dios con cuernos, (para mas referencias, lea "El culto de la Brujería en Europa Occidental" y "El Dios de los Brujos", de Margaret Murray); quién pasaría a ser llamado el diablo por la iglesia católica y sus antiguos seguidores, serían arrojados como adoradores de satanás. Sien embargo, Murray si acertó al afirmar que aunque el cristianismo entro entre los nobles y las clases altas; el paganismo todavía seguía siendo la religión de la gran mayoría del pueblo. Volviendo al tema de Aradia, este texto es extraído del "Libro de las Sombras" de Gardner:
Ekko Azarak,
Ekko, Ekko, Zomelak;
Ekko, Ekko Cernunnos,
Ekko, Ekko Aradia.
Sin embargo, el fundador la
Stregheria (un estilo de wicca italiana), Raven Grimassi, quien desciende de un
linaje de brujas italianas; ha demostrado evidencias que abrieron otra vez las
posibilidades sobre la existencia de Aradia, (y no solo en el folclore), el
culto de la bruja y la realidad del Sabbath o aquelarre. Grimassi demostró que
un grupo de bailarines acrobáticos rumanos, que operaron desde la Edad Moderna,
adoraban a una Reina de las Hadas a
quienes ellos llaman Arada o Irodesa. En
el texto de Leland, Diana aparece como la Reina de las hadas y de las brujas.
En el mismo texto, Aradia da instrucciones para que se haga un baile frenético durante
la cena ritual.
La cena ritual, dice Grimassi; no
es un concepto avanzado para la Edad Media, ni tampoco la existencia de una mesías
femenina. A finales del siglo XIII, una secta basada en los escritos de Gioacchino de Fiore, (quien había predicho la
llegada de la Edad de la Razón, que desplazaría a la Edad del Hijo, como esta
desplazo a la del Padre). La secta creía que su fundadora, Guillermina de Milán; era la
encarnación del Espíritu Santo y venía a la tierra a fundar una nueva era; esta secta
ordenaba como sacerdotes a hombres y mujeres por igual, no hacían ningún tipo
de énfasis a la castidad y vivían todos en comunidad. Cuando Guillermina murió, "los Guillermitas" fuerón perseguidos con saña por la iglesia católica; los restos de la
difunta Guillermina fueron quemados para evitar que se dijera que había resucitado
y la papesa elegida, fue quemada viva en la hoguera. Manfreda Visconti,
fue la desafortunada papesa de los guillermitas; pertenecía a la poderosa familia Visconti, quienes
probablemente inventaron el taroth. Algunos dicen, que el Arcano de la papesa,
es precisamente un retrato de Manfreda. Así pues, ninguno de los elementos que
nos presentó Leland eran modernos, y bien podían encajar dentro del periodo
medieval.
Pero Raven Grimassi no se detiene
allí. Él dice que la historia que presento Leland, es una interpretación distorsionada
y cristianizada de la verdadera leyenda de Aradia
o la Santa Strega. Lo que expone
Grimassi es que el Vangelo, presenta incongruencias y esta artificialmente ajustada
a lo que los inquisidores querían ver en la brujería; tales como la adoración
al diablo. En realidad, el Lucifer que se presenta en el Vangelo, no es otro
que el Dios Sol, Dianus (Apolo) hermano de Diana; y que Aradia no es solo la
hija mitológica de Diana, sino que fue una mortal llamada: Aradia Di Toscano.
Según Grimassi, Aradia Di Toscano
nace en el siglo XIV, en la ciudad de Volterra; el día 13 de Agosto de 1313,
(esta fecha podría ser artificial, para hacer encajar al nacimiento de Aradia
con el día que en la antigüedad se festejaba a la Diosa Diana en el Lago Nemi).
Aradia reúne un grupo de seguidores y trata de revitalizar a la Antigua
Religión, (la religión pagana en Italia). Por el miedo que la iglesia tenía de
Aradia, ellos comenzaron a alegar que las enseñanzas de Aradia eran del
demonio, en efecto; las actas de la época nos dicen que “poderosas familias
italianas, están haciendo que los campesinos regresen a las supersticiones
antiguas”. Aradia es llamada la Santa Strega, porque viajo por toda Italia predicando
el evangelio de Diana y vestida de blanco, esta narración aparece también en el
documento de Leland, titulado como la Casa del Viento; pero no hace mención que
la predicadora sea Aradia.
Así pues, en la Leyenda de la
Santa Strega, (recopilada por Raven Grimassi), se le pone en su boca las
siguientes palabras como su primera predicación a la muchedumbre:
"Benditos
sean los Libres. Bendito sea aquel que se regocije en la Verdad y en el Amor, y
no busca mantener las enseñanzas malignas y equivocadas. Sabed que el espíritu
está sobre todos ustedes, y ese espíritu es el Amor. El Amor no castiga, ni un
día ni la eternidad. No prestéis atención a las enseñanzas del miedo y la
restricción. Benditos sean los libres de espíritu, porque de ellos es el reino
de ambos mundos. Los que hacen esto son los hijos de la Tierra, quienes no
odian, ni enseñan el odio; quienes no temen, ni enseñan el temor; quienes no
restringen ni enseñan restricción. Estos mismos son los hijos del
Espíritu."
Aradia buscaba la libertad de los
oprimidos, la libertad de cada persona y el resurgimiento del paganismo; enfrentándose
a la oposición primero de sus propios padres y después de la iglesia católica y de la nobleza. Hace
un pacto con sus discípulos, instituyendo los Boschettos (Covens) y señalando como y cuando deben celebrarse las tregendas, (que la iglesia llamaría el Sabbath de las
brujas, o aquelarre); para cuando ella se marchase del mundo.
Ante tales afirmaciones de
Grimassi, la profesora y antropóloga, Sabina Magliocco; decide ponerse en
contacto con él e investigar por su cuenta y llega a la conclusión de que: “…Él
esta iniciado en una forma de brujería italiana y popular”. Sobre Aradia ella
publica dos documentos, uno llamado "Who was Aradia?", y el otro titulado
Aradia in Sardinia. En "Who was Aradia?" Ella afirma que no es inverosímil creer
que una mujer asumiera el papel de Aradia, y diera algunas lecciones de vida a
un grupo reducido. También en Aradia in Sardinia, ella encuentra que en el folclore sardo existía, desde
la Alta Edad Media, registros acerca de dos espíritus; uno bueno llamado S’Araja
justa (Rejusta) y uno malo llamado Araja demonium. Nombres que podrían ser los
antecedentes al nombre de Aradia, la hija mitológica de Diana, la Reina de las
hadas y de las brujas.
Aradia como mesías o figura
espiritual está cobrando terreno cada día; mucha gente se convierte al
evangelio de Diana, tal y como la Santa Strega así lo quiso, y no parece inverosímil
que ella llegue a ser la Nueva Diosa de la Edad de la Razón. Y como dijo un
erudito; “…en alguna realidad distante, tanto Jesús, como Buda y Aradia existen, y guían los pasos de sus seguidores”.
En la Leyenda de la Santa Strega, Aradia; habla de si misma de esta manera:
En la Leyenda de la Santa Strega, Aradia; habla de si misma de esta manera:
"Muchas personas comenzaron a
discutir entre sí en relación con Aradia. Sus discípulos se acercaron a ella y
le dijeron: "Mi Dama,
algunos dicen que eres profetisa, y otros dicen que eres una maga, ¿qué le vamos
a decir a quienes pregunten por usted?
Aradia cogió un puñado de tierra,
y mirando a la multitud, dijo: Yo
soy la hija del Sol y la Luna. Yo soy la Tierra. Yo soy el amor a la Libertad,
que es el amor de los Dioses. Y todo aquel que cree en mí, el mismo será un
hijo de la Madre y del Padre que habitan en todas las cosas."
Para más información les invito a
pasarse por la página de Raven Grimassi: http://www.stregheria.com/aradia.htm;
leer THE BOOK OF THE HOLY STREGA (de
Grimassi), los artículos de la profesora Magliocco ¿Quién fue Aradia?, Aradia in Sardinia; y por supuesto, leer Aradia, o el evangelio de las brujas de
Charles Leland publicado en este blog.
http://www.jesterbear.com/Aradia/Aradia.html Who was Aradia?, de Magliocco.
http://www.jesterbear.com/Aradia/Aradia.html Who was Aradia?, de Magliocco.
Interesante
ResponderEliminarFeliz Noche Deseo contactarme con Ustedes?.. jacquelinegajardoa@live.cl
ResponderEliminar